jueves, 16 de diciembre de 2010

Prueba a ser.


Prueba a volar sin alas, a escapar del monótono letargo que se adhiere a tus sentidos. A sentir caricias olvidadas hace tiempo, a encontrar perfumes que te envuelvan sin tocarte y despertar al nuevo día con los ojos cerrados. Prueba a sentirte musgo que tapiza las laderas de tu vida, y a correr colina abajo aunque el vértigo te asuste y sientas miedo. A sentirte espada que desgarra el viento y que abre tu camino hacia mundos que creías solo existen en los cuentos. Prueba a ser barquito de papel y sentir que surcas ríos, aunque el agua esté revuelta y te arrastre la corriente. Y a sentirte trigo que se mece con el viento y que dobla tus deseos sin que llegues a romperte. Prueba a se halcón que surca el cielo y a sentirte arcilla modelada por tus propias decisiones. Y ser copo de nieve a los ojos de un niño, mágico destello, efímero y brillante. Prueba a ser pepita de oro perseguida y deseada y escaparte de sus manos cuando crean que te tienen y a quitarte las espinas de heridas cicatrizadas, que marcaron tu destino y que ahora te acompañan. Puebla a ser la mano que revuelve sus cabellos y a sentirte escalofrió inesperado en una tarde de verano. Y veras que el mundo gira sin parar y que existe mucho más, que la fría piedra bajo la que te escondes.

lunes, 18 de octubre de 2010

¿A que huelen las nubes?


Inmisericordes se muestras los días que transcurren rasgando el tiempo, dejando estelas de sensaciones inacabadas y de suspiros entrecortados. Correr tras ellos es ardua tarea, e incluso inútil diría yo. Pero nos empeñamos en emprender constantes maratones aun a sabiendas de que no existe meta alguna, que no hay un premio al final del trayecto porque ni siquiera hay un final. No importa, debemos correr despavoridos, jadeando por la fatiga y por la falta de aire.
¡Más rápido, más lejos! El corazón se nos sale por la boca, a algunos incluso en sentido literal, pero no hay tiempo que perder, ¡más rápido, más rápido! Alguien cae delante de nosotros pero no podemos ayudarle, no debemos, es nuestro enemigo. Hay que pisotearle asegurándonos de que así no volverá a levantarse. Un competidor menos. ¿Pero un competidor de qué? ¿Por qué estamos corriendo? ¿Hacia dónde? ¿Para qué? No importa, ya pensaré en ello después. ¡Rápido, rápido!
Hasta que un día nos damos cuenta de que hemos pasado tanto tiempo corriendo, que hemos olvidado cómo se camina. En algún momento de la carrera dejamos de mirar a nuestro alrededor y nunca llegamos a saber cómo es el verdadero olor de las nubes, o como sabe una caricia. Pero que importa ya eso. Fuimos maratonianos por toda una vida, ahora qué más da.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

¿Me lo cambias?


Tengo pensamientos en mi mente que se mueren por salir y un cajón lleno con los abrazos que nunca he dado. Tengo una fuente que mana mariposas y una caricia guardada en una urna de cristal. Tengo una caja de Pandora sin Pandora y un lunar que corretea por mi espalda y duerme en mi ombligo. Tengo los versos de un loco en una libreta sin hojas y un árbol que cada primavera florece estrellas. Tengo una serpiente multicolor que me canta nanas por las noches y una pluma estilográfica que me recita poemas. Tengo un globo lleno con las risas de un bebé y la escoba de una bruja buena que conocí en la luna. Tengo un escalofrió dentro de una botella y metido en un saquito de terciopelo, el ronroneo de un gato.
Ahora estoy dispuesta a dártelo todo a cambio de un beso, ¿aceptas?

sábado, 14 de agosto de 2010

Aprendiendo a caminar


Mi camino estaba lleno de piedras con las que tropezaba una y otra vez. En cada nueva caída mis rodillas y mis manos sangraban. Pero aprendí a reconocer cada piedra, cada bache del camino y ahora lo recorro con los ojos cerrados, dejándome llevar. Dejé de sangrar por mis heridas, dejé de sentir miedo y mis cicatrices son los ojos que me guían por el pedregoso sendero.

jueves, 10 de junio de 2010

Despertares


Esta mañana un descarado rayo de sol se ha colocado sobre mis parpados. Ese rayo juguetón se divertía recorriendo mi rostro e intentando despertarme. Finalmente he abierto los ojos para descubrir, que ese rayo juguetón, era tu mirada clavada en mí. Te he sonreído y tú me has hecho el amor. Me gustan estos despertares.

jueves, 13 de mayo de 2010

Cruce de caminos


¿Quién decide que los caminos se crucen? ¿Quién elige cuando y como nuestras vidas se cruzarán con otras? Aunque claro, no todas las vidas con las que nos cruzamos nos marcan de la misma forma.
Algunas pasan a nuestro lado como fantasmas, invisibles, incorpóreas. Nunca llegamos a ser conocedores de su presencia y las esquivamos de manera inconsciente, continuando con nuestro camino. Otras pasan muy cerca, apenas un roce que nos provoca un escalofrío, el vello se nos eriza y el corazón galopa desbocado, o bien se nos adhieren como una lacra que debemos arrastrar y que ralentiza nuestro camino. Pero esto apenas dura una vida y lentamente se escurren por nuestra piel hasta convertirse en un lejano recuerdo, que borroso permanece en nuestra retina, hasta que finalmente se desvanece. Sin embargo hay otras vidas que cambian nuestra existencia. Estas son mis favoritas. Nuestros caminos se cruzan, o más bien se chocan y el eco de ese impacto perdura. Esas vidas nos tocan como las cuerdas de una guitarra, haciéndonos sonar por toda la eternidad. Y ya nunca volvemos a ser los mismos. Nos forjan el alma y nos moldean la esencia.

martes, 6 de abril de 2010

Sobre el eje de la Tierra


Despierto de mi letargo y observo el mundo que me rodea. Colores, sabores, olores que me envuelven, me besan y me acarician. La brisa eriza mi vello y la bruma refresca mi cara. Los sonidos me visten y los olores me desperezan. Ahora camino de nuevo y mis pulmones se llenan de aire. Inhalo y exhalo la vida a través de mi sonriente boca. Deslumbro con los destellos que salen de mis ojos. Estoy sobre el eje de la tierra, que nuevamente vuelve a girar para mí.

viernes, 5 de febrero de 2010

Dime


Puedo arquear mi espalda hasta convertirla en un círculo perfecto en el que puedes entrar. Deseo que lo hagas, que explores, que busques y que halles. Entra en mi círculo. Entra en mí y quédate. Dibuja con mi cuerpo formas imposibles, eriza mi vello y vuélveme las pecas del revés. Puedo ser finita o infinita, tú eliges. Y puedo permanecer arqueada, o desdoblarme para que nadie más pueda entrar. Ahora dime; ¿Qué quieres hacer?

lunes, 18 de enero de 2010

Formas de amar


Soy humo flotando en el aire y con mi cuerpo dibujo caprichosas formas etéreas. Tú te deleitas observándome, imaginado que nueva forma adoptaré. Pero al elevarme me desdibujo, pierdo intensidad, y entonces tú abres la ventana para que un torbellino de aire nuevo pueda entrar, haciéndome desaparecer.

lunes, 11 de enero de 2010

Bendita locura


Cuerpos adultos rebosantes de hormonas púberes. Locura transitoria que enajena los sentidos. Besos lascivos robados a un tiempo fugaz. Respiraciones agitadas y latidos acelerados. Sentimientos contradictorios y cuerpos enloquecidos.
¡Cuántas sensaciones en tan solo una fracción de segundo!

lunes, 4 de enero de 2010

Bagaje


A la maleta de Silvie se le ha roto el asa. Esa maleta pesa ya demasiado.
Silvie la arrastra a todas partes y jamás se separa de ella. En alguna ocasión intentó vaciarla un poco para hacerla más liviana, pero no puede abrirla. Olvidó la llave en algún lugar que no consigue recordar.
Silvie ha tomado una drástica decisión. La rajará, y así podrá vaciar su contenido y soltar algo de lastre.
¡Lo ha hecho! La ha apuñalado. Al fin se ha atrevido, y ahora la maleta sangra por la herida. Sangra miles de palabras no dichas y guardadas hasta ahora, y lo hace a borbotones.
Silvie la deja desangrarse junto a un sucio contenedor.
Con paso firme y ligero se aleja de su vieja maleta. Ahora sabe que ya no la necesitará jamás.